Esto lo dice en la solapa de este libro de Walt Whitman:
En 1862, horrorizado por la guerra civil que azotaba al país, se dedicó a cuidar de los heridos y de los enfermos...
Y de paso se dedicó, asimismo, a dejar constancia por escrito de las impresiones que le causaba todo el horror que iba encontrando a su paso:
Hoy, los poetas, salvo excepciones, estamos en retaguardia, lo más lejos posible de cualquier tipo de horror: lo más lejos posible de cualquier rastro de humanidad para con los demás: lo más lejos posible, incluso, de la más minúscula de las gotas de sangre: y lo más lejos posible también de los aullidos de dolor y socorro de nuestros semejantes...
"salvo excepciones"...y es un alivio. No le encuentro el sentido a lo contrario.
ResponderEliminarGracias estrella.